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Cada individuo como ser social requiere satisfacer unas necesidades básicas que están en relación directa con otros individuos. Las relaciones que se establecen entre los seres humanos no siempre son positivas como sería lo ideal, dado que esto depende en gran medida de la cosmovisión individual y la génesis de la personalidad, de donde se obtiene como resultado personas con diferentes actitudes frente a la vida y sus avatares. Cuando el individuo se desarrolla en ambientes potenciadores de aspectos positivos su constructo actitudinal será más coherente y por lo tanto le permitirá ser generador de empatía con los demás y ser un gran potenciador de trabajos en equipo, por el contrario cuando se desarrollan actitudes negativas baja la empatía, el compromiso y no media la colectividad para alcanzar las metas.
Nuestro
ser interior nos lleva a tener ciertas actitudes perjudiciales a nivel grupal
que generan ineficiencias en el trabajo en equipo. Tomar conciencia
de esta situación permite a los integrantes de un equipo establecer pautas y trabajos
que las corrijan, para lograr así que cualquier equipo sea productivo, con
buenos resultados y mantener un ambiente armonioso.
Uno de los aspectos que se deben
considerar en el éxito o fracaso de un trabajo en equipo es cuando se presenta
actitudes individualistas, ya no son
iguales competencia que cooperación. Cuando
uno de los integrantes del equipo quiere distinguirse por arriba de sus
acompañantes se tiene que tener atención ya que estas personas están
enseñadas a trabajar solas y no les es fácil entender que existe un equipo y un
líder.
Por lo
cual en el espíritu de equipo, se debe de dejar a un lado los pensamientos individualistas y
anteponer los intereses del equipo. No quiere decir que no se pueda expresar
las ideas, sino que estas deberán de estar planteadas en un bien común.
Las cinco C de trabajo en equipo las
cuales tienen una gran incidencia en que el trabajo en equipo sea un éxito o un
fracaso como resultado de nuestras actitudes positivas o negativas en nuestro
comportamiento:
1. Complementariedad. Un equipo funciona cuando cada miembro
domina una parcela determinada del proyecto, es decir, es especialista en un
área concreta.
2. Coordinación. Debe tener un líder que encabece la
organización y coordine la puesta en marcha del proyecto.
3. Comunicación. Ambiente propicio en el que se facilite
una comunicación abierta y en varias direcciones entre todos los miembros del equipo.
4.
Confianza. Confiar en el buen hacer del resto de
sus compañeros.
5.
Compromiso. Dar lo mejor de sí mismo y se integra en
él.
OBJETIVO
Sensibilizar a los integrantes del
equipo de trabajo sobre la importancia de la actitud como pilar fundamental en
el logro de las metas propuestas.
INVESTIGACIÓN
ACTITUD
Existen muchas definiciones sobre LA ACTITUD, de las cuales
se describen a continuación:
· Acorde
con los diversos conceptos y sus componentes: Cognitivos, Afectivos y
Conductuales, Rodríguez, Aroldo en su libro Psicología
Social la define como: Una organización duradera de creencias y
cogniciones en general, dotadas de una carga afectiva en favor o en contra de
un objeto social definido, que predispone a una acción coherente con las
cogniciones y afectos relativos a dicho objeto.
El desarrollo
y la puesta en práctica de buenas relaciones son determinantes para una buena
convivencia, pero si las relaciones se han desarrollado con dificultad el
sujeto puede presentar desajustes consigo mismo, con su medio y en su relación
con los demás.”
· Es el comportamiento que emplea
un individuo para hacer las labores. En este sentido, se puede decir que es su
forma de ser o el comportamiento de actuar, también puede considerarse como
cierta forma de carácter, por tanto, secundario, frente a la motivación
biológica, de tipo primario que impulsa y orienta la acción hacia determinados
objetivos y metas.
· La actitud se refiere a un
sentimiento a favor o en contra de un objeto social, el cual puede ser una
persona, un hecho social, o cualquier producto de la actividad humana o
personal.
La actitud puede ser un resultado de la
experiencia, y puede estar influenciada por las normas y roles sociales. Las
conclusiones que sacamos de esas experiencias influyen en las creencias y
comportamientos del individuo, sin embargo, la actitud se puede cambiar y
mejorar. En el fondo, cambiar de actitud significa buscar un cambio en la
perspectiva de la vida. Para mantener una actitud positiva se hace necesario adoptar
buenos hábitos de vida, como por ejemplo: autoanalizarse, buscar formas de
obtener influencias positivas, ser optimista, alejarse de personas tóxicas y
enfocar los logros hacia lo que se desea.
PROPUESTA:
Realizar talleres o
actividades con pruebas o test de personalidad donde se puedan conocer las
características de cada uno de los integrantes y en reuniones posteriores se
den a conocer los resultados individuales con sus fortalezas o debilidades, que
permitan definir un plan de trabajo personalizado para mejorar la actitud.
AUTORES
Elizabeth Hoyos Rodas
Gladys Beatriz Tangarife Higuita
Nidia Maricela Chavarría Arango
Viviana Janeth Madrigal Arboleda
Carlos Alberto Chica Correa
Mauricio Vanegas Arango
Carlos Alberto Uribe Echavarría
REFERENCIA
1. Miarevista.es Editorial de Mulas Raquel
2. Zinet
Media Global/Ancora 4028045. Madrid, España
4. Tomado
de http://www.docenteinem.org/2014/11/las-actitudes-y-relaciones.html.
Félix Ponce Castrodocenteinem/psicólogo
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